© Daño Cerebral Estatal | 15/12/2025 | Ana Cabellos, presidenta de Daño Cerebral Estatal, Jesús Martín Blanco, director del Real Patronato sobre Discapacidad y Libertad Martínez, directora gerente de Daño Cerebral Estatal.

CRÓNICA | Jornada de cierre del proyecto ‘Plan de Apoyo a la empleabilidad de las personas con DCA en entornos rurales’

El pasado 11 de diciembre tuvo lugar la jornada de cierre del Plan de Apoyo a la Empleabilidad de las Personas con Daño Cerebral Adquirido (DCA) en entornos rurales, una iniciativa de Daño Cerebral Estatal financiada por el Real Patronato sobre Discapacidad.

El pasado 11 de diciembre tuvo lugar la jornada de cierre del Plan de Apoyo a la Empleabilidad de las Personas con Daño Cerebral Adquirido (DCA) en entornos rurales, una iniciativa de Daño Cerebral Estatal financiada por el Real Patronato sobre Discapacidad.

El encuentro, que reunió a entidades, profesionales y personas beneficiarias del proyecto, puede verse íntegro en YouTube:
▶️ https://www.youtube.com/watch?v=RDxTkTULe78

Una apuesta por la inclusión desde el territorio

Moderada por Libertad Martínez, directora gerente de Daño Cerebral Estatal, la jornada puso en valor un proyecto que ha trabajado en zonas rurales de Toledo y Alicante junto a la Fundación Carmen Cabellos y Daño Cerebral ADACEA Alicante, buscando mejorar la empleabilidad de personas con DCA que viven en entornos con menos recursos y oportunidades.

La bienvenida institucional corrió a cargo de Jesús Martín Blanco, director del Real Patronato sobre Discapacidad, quien destacó el papel del empleo en la autonomía personal y la necesidad de adaptar las políticas públicas a realidades tan específicas como el DCA o la ruralidad. Subrayó que desde el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 se está trabajando en reformas legislativas —incluyendo avances en la Ley de Seguridad Social y en la normativa de Dependencia— que buscan mejorar la vida de las personas con discapacidad y sus familias, garantizando derechos, apoyos y condiciones más justas para su vida diaria.

Por su parte, Ana Cabellos, presidenta de Daño Cerebral Estatal, recordó que según los datos del estudio de Daño Cerebral Estatal (La situación de las personas con Daño Cerebral Adquirido en España, 2023), 100.000 personas con DCA viven en zonas rurales, y más del 80% presenta dificultades en actividades básicas de la vida diaria. A ello se suma la falta de transporte adaptado, recursos especializados o variedad formativa y empresarial en los pueblos.
Cabellos puso de manifiesto la importancia de dar continuidad a este tipo de proyectos en los que es necesaria “la labor de entidades especializadas en el propio terreno para que las personas no tengan que salir de su entorno”. Para ello, añadió, es imprescindible la colaboración entre administraciones y entidades, así como la financiación estable.

Metodología y aprendizajes del proyecto

Las preparadoras laborales Ana María Vázquez Páramo (Fundación Carmen Cabellos) y Beatriz Fernández Milla (Daño Cerebral ADACEA Alicante) presentaron el trabajo realizado en las diferentes fases del proyecto:

Ambas profesionales incidieron en la importancia de la intervención individualizada. Vázquez Páramo subrayó el impacto de las secuelas invisibles, especialmente las conductuales, que pueden poner en riesgo la continuidad en el puesto. Por ello destacó la necesidad de sensibilización y colaboración con las empresas.

Fernández Milla explicó que antes de reincorporarse al mercado laboral, la persona necesita un periodo de entrenamiento, recuperación de motivación e identificación de intereses, porque “no se trata solo de adaptar un puesto, sino de entrenar las capacidades que permitirán mantenerlo”. Las prácticas reales en entornos laborales son clave para generar confianza y autonomía.

Ambas coincidieron en que no hay dos personas con DCA iguales, y que el éxito depende del acompañamiento y los apoyos personalizados.

La experiencia de José Francisco: “El esfuerzo es mucho mayor cuando tienes dificultades”

Uno de los momentos más significativos de la jornada fue el testimonio de José Francisco Martínez, vecino de Agost (Alicante) y beneficiario del proyecto. Tras un accidente que le provocó DCA hace 10 años, su vida laboral y personal cambió por completo. Gracias al acompañamiento de Daño Cerebral ADACEA Alicante, ha recuperado autonomía y participado en su comunidad:

“Al principio mis expectativas eran nulas. Hoy he logrado metas que creía imposibles, como coger el autobús solo.”

José Francisco animó a las empresas a dar oportunidades:
“El esfuerzo de una persona que tiene dificultades para hacer algo es mucho mayor que quien no las tiene.”

Conclusiones: un compromiso que debe continuar

El cierre de la jornada dejó claras varias necesidades detectadas durante el proyecto:

• La inserción sociolaboral de personas con DCA en zonas rurales presenta mayores barreras y requiere apoyos específicos.
• La escasez de recursos especializados y la dispersión territorial dificultan el acceso a programas de empleo.
• La infradetección del DCA retrasa intervenciones y repercute en la vida laboral.
• Se necesitan más itinerarios formativos adaptados, sensibilización empresarial y apoyos continuados.
• Impulsar la inclusión sociolaboral en zonas rurales contribuye a comunidades más equitativas e inclusivas.

El proyecto demuestra que trabajar desde el terreno, con visión a largo plazo y acompañamiento especializado, es clave para que las personas con DCA puedan acceder a oportunidades reales sin tener que abandonar sus pueblos ni su entorno social.